"SALTO MORTAL", Kenzaburo Oé. (1)

Casi un mes viví con Salto mortal junto a la cama. Casi un mes abriéndolo luego de abrir los ojos en la mañana. Casi un mes amaneciendo a su lado, llevándolo bajo el brazo y hablándole de él a todo el mundo. Cuando lo terminé me di cuenta de dos cosas: de que necesitaba escribir sobre esa novela y de que era hora de comenzar un blog. Esta es la primera entrada.

Salto mortal: Novela de Kenzaburo Oé, japonés ganador del Nobel, cuya obra muchos han considerado autobiográfica. Discutible, pues en realidad él mismo no es el centro de su trabajo. Oé ha dicho que el tema principal en gran parte de su obra ha sido entender cómo su familia ha convivido con un hijo que padece minusvalía mental. Así que sobre la obra de Oé podría establecerse un debate del todo contemporáneo: cuándo la literatura comienza a ser autobiográfica, cuándo deja de serlo. Más adelante hablaré de Morio, una figura que es central en la novela y que debería serlo en ese debate posible del que hablo.

Sinopsis obligada: Un movimiento religioso está renaciendo, luego de que diez años atrás sus líderes apostataran de las creencias que ellos mismos habían promulgado. Justo entonces llegan al movimiento dos personajes que le darán un nuevo significado: Kizu, un anciano profesor que, agobiado por un cáncer, regresa a su país natal e Ikuo, un joven obsesionado con la necesidad de escuchar la voz de Dios. Luego de que entre los dos nace una relación de pareja, conocen a Patrón y a Guiador, los líderes de la nueva iglesia. Pronto Guiador muere y entonces Kizu e Ikuo comienzan a tomar papeles decisivos en el movimiento religioso.

Ahora: ¿De qué trata Salto mortal? Se me ocurre que de dos cosas en especial: del movimiento y de la libertad sin Dios.